4 tips para dormir tranquilamente a tu bebé

¿Qué ocurriría si te dijéramos que hay formas de reducir los efectos negativos de que tu bebé se despierte por las noches, y que también existen múltiples métodos para que el sueño de ambos sea más reparador y placentero?  

 A continuación te compartimos cuatro tips que mejorarán tus horas de descanso para que sigas disfrutando de tu bebé por la mañana. ¡Presta atención!

Conseguí una cuna colecho

¿La última solución para la hora de dormir a tu bebé o una muy mala idea? Mientras que varios estudios  han demostrado contundentemente que el practicar el colecho con tu bebé ayuda a reducir hasta un 70% el riesgo del Síndrome de Muerte de Cuna (o SIDS por sus siglas en inglés), muchas madres miran todavía con dudas esta práctica. Sin embargo, no te lo estaríamos recomendando sin saber los beneficios a largo plazo que tiene la práctica del colecho.

En primer lugar, el enlace madre y bebé se fortalece con el tiempo, pues se incrementa la cercanía y contacto, las cuales son esenciales para su sano desarrollo psicológico y emocional.

En segundo lugar, el colecho no es para siempre. Los expertos recomiendan practicarlo desde el primer día de nacido hasta los 6 meses como mínimo para reducir el SIDS, y hasta un año para casos especiales. En estos meses, tu pareja o vos, podrán establecer una rutina funcional sana y libre de malos hábitos que les permita recuperar su horario de sueño, una vez que su pequeño comience a crecer.

En tercer lugar: la calidad del sueño del bebé, como la de los padres, aumentará conforme pasen los días y se establezcan los límites de estas rutinas. 

Espera noches buenas y noches malas, pero, de establecer la rutina correctamente, es muy probable que puedas lograr que tu bebé se duerma sin episodios de gritos y llantos. ¡En serio, inténtalo!

Dormir temprano (y otras rutinas)

Todo padre espera que sus bebés se vayan a dormir sin llorar a todo pulmón, sin embargo, esto solo se logra cuando se establece un horario fijo y una rutina que lo calme. 

Esta serie de pasos tiene que estar totalmente ajustada a tu criterio y  a tu ritmo, y tiene que ser natural para tí. Si sientes que no es así, establece una nueva rutina con tu pareja para que puedan ser constantes. ¡Recuerda que la constancia es la clave!

Además, no solo se trata de dejar a tu bebé en su cuna y apagar las luces. Aplicar esto requiere realizar diferentes acciones para que tu pequeñín logre relajarse profundamente. Este ritual puede variar según el carácter y temperamento de tu bebé pero para darte un ejemplo, la rutina de tu bebé podría verse así:

• Baño relajante y/o ponerle su pijama  - 7:00  a 7:20 pm*
• Modular luces a un brillo tenue - 7:20 pm*
• Sesión de juego: - 7:20 a 7:35 pm*
• Arroparlo en su cama - 7:36 -7:40 pm*
• Sesión de caricias, cuentos o música para dormir  - 7:41 a 7:59 pm
• Hora de dormir (apagar luces): 8:00 pm

Un beneficio extra se relaciona con la calidad de sueño que tu bebé obtiene. Está comprobado que aquellos pequeños que se van a la cama temprano suelen despertarse menos en la noche y descansan más, plenamente. ¡Ponlo en práctica!

No abuses de tus recursos para hacer que se duerma 

Muchos padres primerizos suelen desesperarse los primeros meses para lograr que sus hijos concilien el sueño. Por ello, una vez que encuentran una técnica para que sus hijos concilien el sueño la ocupan a la menor provocación, hasta que su pequeño comienza a hablar o encuentran otra forma de calmarlo. 

Si funciona, ¿por qué no repetirlo? Este tipo de comportamientos, repetidos de manera excesiva, pueden perjudicar más que ayudar, pues le estás enseñando a tu bebé que sólo cuando ocurre esta acción (cantarle, acariciarle su espalda, ponerle música, etc.) está bien irse dormir. 

Por eso, si tu bebé aún depende de que lo cargues y le cantes pasados los 5 meses de nacido, tiempo promedio en el que un bebé se ajusta fácilmente a una rutina, varios expertos recomiendan suspender por completo esta “muletilla para dormir” para evitar la dependencia.

Una técnica que sugerimos es repetir una acción relajante para tu pequeño, una vez que esté en su cuna, durante solo un par de noches. Tras unas cuantas ocasiones, omite esta acción  por completo. ¡Verás entonces que tu bebé se acostumbra a dormirse por su cuenta poco a poco sin necesidad de que mamá o papá entren en acción! 

Una última comida (sorpresa) antes de dormir

¿Te has despertado en medio de la noche? ¿Ha sido por hambre? ¡Adivina a quién también le pasa! Nuestro último consejo está enfocado a disminuir las veces que tu bebé se despierta por hambre. No decimos que vaya a suspender todas las ocasiones en las que tu bebé se despierte (una cuna colecho te facilitará el amamantar a tu bebé por las noches, en caso de que lo necesites) pero sí evitará que se despierte constantemente en las próximas horas,

Una vez que hayas colocado a tu pequeño a dormir y tú estés a punto de hacer lo mismo,prepara una mamadera con leche materna o fórmula, despierta a tu bebé gentilmente y dale de comer un poco. Dependiendo de tu bebé, cabe la posibilidad de que vacíe todo el contenido del biberón. Una vez que termine, y aún somnoliento, regresalo a su cuna, tomando las merecidas precauciones para que no tenga cólicos. 

Un tip extra es que: dependiendo de si tu bebé está pasando por la dentición, puede que tu bebé tenga algunas molestias. antes de dormir. Para evitar despertarlo por completo, te recomendamos usar alguno de nuestros chupones con tecnología PhysioForma para que pueda continuar durmiendo. ¡No te preocupes! La tecnología de PhysioForma está desarrollada para adaptarse totalmente a su boquita, y ayuda a mejorar su respiración fisiológica.